Una buena educación hará que tu perro no ladre cuando llamen a la puerta. Es algo muy habitual, pero con los consejos que podrás encontrar a continuación te darás cuenta de que se puede conseguir que el perro ladre.

¿Por qué los perros ladran cuando llaman a la puerta?

Tienes que saber que los perros son animales muy territoriales, lo que quiere decir que cuando llamen a la puerta los perros se pueden sentir amenazados. Esto hace que ladren como medio de defensa para que la persona que está en el exterior no entre. Es verdad que es un comportamiento típico y no es un problema de conducta. Pero los ladridos pueden molestar o hacer que la otra persona se vaya. Por este motivo puede ser una buena idea poner medios para que el perro no ladre.

Antes de entrar en detalles, debes saber que el timbre es un estímulo neutro que hace que el perro se sienta atrido a ladrar de manera natural como síntoma de advertencia. Cuando suena el timbre aparecen otras personas, de aquí que tenga ganas de ladrar.

Todo esto hace que el timbre sea un estímulo condicionado. Gracias a esto y a un poco de esfuerzo se puede conseguir que el perro deje de ladrar cuando llaman al timbre. Eso sí, no será fácil y habrá que trabajar bastante con la mascota para poder conseguir buenos resultados. (fuente: cerrajerosmallorca.top)

¿Cómo enseñar a un perro a no ladrar cuando llaman al timbre?

Para comenzar, tendrás que solicitar de la ayuda de otra persona para que pueda llamar mientras estás en casa con tu mascota para enseñarla lo que no debe hacer. Por supuesto, tienes que tener en cuenta que el perro no tiene que sentirse como líder de la manada. En este caso líder de la familia. Si os domina, puedes tener la certeza de que este entrenamiento no tendrá sentido.

Con la ayuda de un móvil, tienes que solicitar a la otra persona que llame al timbre. En ese momento el perro comenzará a ladrar. En vez de reñirle o cualquier otra cosa, lo mejor que puedes hacer es ignorarlo para que el perro se dé cuenta de que no tiene sentido ladrar cada vez que llamen al timbre.

Es verdad que este proceso será lento y dependerá del perro. Habrá que repetir esto hasta que el perro deje de ladrar. Si tras un tiempo suena el timbre y el perro ya no ladra, entonces le tendrás que felicitar y dar un premio. Gracias a esto el perro comenzará a ver que si llaman al timbre y no ladra esto se ve recompensado con un premio.

El perro no lo tendrá fácil y la operación tendrá que repetirse muchas veces. Si el precio es recibido en más de una ocasión, puedes tener la certeza de que tu mascota dejará de ladrar cada vez que suene el timbre. Puede que incluso el primer día no obtengas resultados. Pero hay que seguir intentándolo hasta conseguir el objetivo final, que el perro no ladre cada vez que suene el timbre.

El objetivo de este entrenamiento siempre debe ser el de reforzar el comportamiento adecuado del perro. Si el perro ha llegado a casa hace poco, el proceso de aprendizaje se realizará en pocos días. En cambio, si el perro está acostumbrado a ladrar mucho cada vez que llaman al timbre y le hemos dejado llevar esa conducta durante mucho tiempo, tienes que tener claro que el proceso de aprendizaje será mucho más lento. Es decir, tardará bastantes días o incluso semanas en darse cuenta de lo que debe hacer. Ten calma y te puedo asegurar que los esfuerzos merecerán la pena.