Los perros son las mascotas favoritas de muchas personas y se llegan a convertir en un integrante más de la familia. Como su dueño tienes la responsabilidad de garantizar que tu amigo peludo se encuentre en un ambiente confortable y tenga una buena alimentación.

Una de las mejores opciones para cubrir las necesidades nutricionales de los perros, son los piensos. Estos alimentos secos están formulados especialmente para cada edad y condición especial de tu compañero canino.

No obstante, algunas veces los perros muestran resistencia a alimentarse con piensos, particularmente cuando vienen de otro tipo de alimentación. Para que te sea más sencillo acostumbrarlo a comer pienso, aquí te traigo algunos trucos que te serán de mucha utilidad.

1. Utiliza su olfato

Los perros tienen un olfato mucho más desarrollado que el de los seres humanos y muchas sensaciones las perciben por este sentido. Una buena manera de estimular a tu mascota a comer el pienso es hacer que perciba su olor.

Para esto, te recomiendo que dejes pequeñas porciones de pienso en las zonas donde generalmente se mueve el animal. Esto hará que sienta curiosidad por el alimento y puedes ir guiándolo hasta el lugar donde tiene su cuenco de comida.

2. No realices cambios bruscos en su alimentación

Si tu mascota se ha venido alimentando con otro tipo de comida, como las sobras caseras o alimentos húmedos, es complicado que acepte rápidamente el cambio. Lo más conveniente es que lo vayas acostumbrando de manera gradual al pienso.

Un truco que puedes seguir es mezclar el pienso con el tipo de alimentos que consume regularmente, a fin de que se vaya acostumbrando a su sabor. Te recomiendo que cada día disminuyas la cantidad de la otra comida, hasta que sea sustituida totalmente por el pienso.

3. No le ofrezcas otras comidas

Una vez que has realizado el cambio gradual en la alimentación de tu mascota hacia el pienso, no le ofrezcas otro tipo de alimento. Esto puede ocasionar que comience a rechazar la comida seca y debas empezar nuevamente el proceso de adaptación al pienso.

Es importante que pongas reglas claras en casa para evitar que otros integrantes de la familia le ofrezcan al perro sobras u otras comidas. Esto puede causarle confusión y puede crear desbalances en sus requerimientos nutricionales.

4. Ablanda el pienso

Algunas veces el perro suele rechazar el pienso porque no le agrada la textura del alimento seco. Por tanto, una buena idea puede ser humedecerlo con agua o preferiblemente con caldo de pollo que hayas preparado en casa.

En caso de utilizar el caldo de pollo, debes tener mucho cuidado al prepararlo para que no tenga ingredientes que afecten la salud de tu mascota como cebolla o mucha sal. Durante el invierno, humedecer el pienso con agua caliente o el caldo, hará que el animal sienta un mayor gusto por su alimento.

5. Ejercítalo de forma frecuente

Es clave que tu mascota salga cada día a dar un paseo para que se estimule tanto su apetito como su metabolismo. Por otra parte, esto ayudará a que se sienta menos tenso y ayudará a mantenerlo en un buen estado de salud.

Muy probablemente luego de un paseo vigoroso, tu perro llegará a casa hambriento y mostrará una menor resistencia a alimentarse con el pienso. Si lo haces de forma rutinaria, el animal terminará asociando el paseo con su posterior comida.

6. Garantiza sus necesidades nutricionales

Al igual que ocurre con las personas, no todos los perros tienen las mismas necesidades nutricionales. Es imprescindible que garantices que estás comprando el pienso apropiado para las características de tu mascota, para lo que te recomiendo que consultes al veterinario.

La mayoría requiere una gran cantidad de proteínas y algunos necesitan una alimentación especial si tienen alguna condición de salud particular. Algunos de los mejores piensos para perros, los puedes encontrar en Arquivet, donde se han preocupado por formular sus alimentos con un excelente sabor y calidad.

7. Aliméntalo a las mismas horas

Para ayudar a que tu mascota establezca una rutina de alimentación, debes tener un lugar en la casa que asocie con su sitio de alimentación. Asimismo, es conveniente que tenga un horario de comida y lo mejor es dosificarle el alimento.

Algunos expertos recomiendan que se le brinden de dos a tres raciones diarias que cumplan con sus requerimientos, con base a su edad y peso. Lo mejor es establecer un horario de alimentación en la mañana y otro en la tarde y retirar el cuenco luego de 30 minutos así el animal no haya comido.

8. Varía el pienso cada cierto tiempo

Si tu perro se ha venido alimentando con pienso y de repente deja de mostrar apetito, puede ser causado por diversas razones. No obstante, lo primero que debes comprobar es si el animal se ha cansado del sabor de la comida.

Lo más conveniente para evitar este inconveniente es que varíes el sabor del pienso cada cierto tiempo o combinar distintos sabores. Se debe tomar en cuenta que todos los piensos que selecciones tengan un buen contenido nutricional y puedes combinarlo con alimentos húmedos para variar la textura.

9. No olvides el agua

Los perros son animales que requieren estar adecuadamente hidratados, ya que solo perder el 10% de su contenido de agua, puede traer consecuencias graves a su salud. Por tanto, el cuenco del agua siempre debe estar lleno con líquido fresco y limpio.

Además, al ser el pienso un alimento seco es muy importante que tu mascota tenga agua disponible al momento de tomar sus comidas. Esto hará que pueda digerir más fácilmente el pienso y se encuentre mucho más saludable.

10. Comprueba que esté sano

Si tu mascota pierde el apetito de forma repentina y ya no quiere comer el pienso, es muy importante que revises su estado de salud. Lo primero es comprobar su dentadura porque si tiene dientes rotos o dañados, se le puede hacer difícil masticar la comida seca.

También puede ocurrir que el animal rechace su comida habitual si ha sido vacunado recientemente o ha cambiado de vivienda. En estos casos, debes tener mucha paciencia y permitir que tu mascota tenga su tiempo de readaptación, después del que seguramente va a recuperar su apetito.

11. Sé constante

Muchas veces cuando estamos entrenando a una mascota a crear nuevos hábitos, podemos perder la paciencia. El truco para lograr que tu amigo peludo se acostumbre al pienso, es que seas constante y no cedas.

Puede que en algún momento sientas que el animal no se está alimentando o puede sufrir algún daño. No obstante, si ya has comprobado su estado de salud, lo más probable es que el perro esté pasando por un período de adaptación y es importante que no cambies su alimentación y así lograrás que la acepte totalmente.